Brava bestia del averno,
terror para ti es la lanza
de obsidiana y rabia ciega
de aquel de argéntea coraza.
Alma impura yace tras
esa loriga de plata
mas a él nos consagramos
si aquí amenazan tus llamas.
"Violencia y destrucción,
mensajero de la Parca.
Para nada más existo.
Soy agonía, soy matanza".
Eso grita el asesino
antes de mostrar batalla
al reptil alado y bruno
que al pueblo norn avasalla.
Lánzase el negro dragón
contra el de la alabarda.
Pavés en alto, resiste,
y finta cuando le alcanza.
Incrústale en el cuello
su arma de hoja tiznada.
Ruge la fiera, colérica,
y sangre bullente mana.
A tierra cae el vil lagarto.
Vocea sin esperanza.
Atraviesa el asesino
la testa de la alimaña.
No tiene gloria de héroe,
y tampoco la reclama:
no ha matado por justicia,
es por sed de sangre insana.
-Niklas Kvarforth.